Organizar una boda es una aventura tan emocionante como desafiante. Para muchas parejas, es la primera vez que se enfrentan a la tarea de planificar un evento de esta magnitud, lo que puede llevar a cometer ciertos errores que afectan la experiencia tanto para los novios como para los invitados. Con la guía de expertos en el sector nupcial de The Brible, te compartimos una lista de los errores más comunes y cómo evitarlos para lograr una boda inolvidable y sin contratiempos.
No establecer un presupuesto claro y realista
Uno de los errores más comunes en la planificación de una boda es no definir un presupuesto claro y realista desde el inicio. Sin una cifra establecida, es fácil que los gastos se disparen y se generen tensiones en la pareja. Lo ideal es dividir el presupuesto en categorías (banquete, vestido, música, decoración, etc.) y reservar un pequeño porcentaje adicional para imprevistos. ¡Recuerda que una boda espectacular no siempre significa una boda costosa!
Intentar hacer todo tú mismo (DIY)
Los proyectos de “hazlo tú mismo” (DIY) pueden agregar un toque personal y único, pero es importante no sobrecargarse. Optar por hacer recuerdos, invitaciones o decoraciones puede ser una buena idea, pero es recomendable dejar ciertos aspectos en manos de expertos, especialmente la comida, las bebidas y el montaje. Esto garantizará que el día de la boda no haya errores y puedas disfrutar y no preocuparte por tareas logísticas que podrían no salir como esperas.
Ignorar la logística de transporte y hospedaje de los invitados
Si tienes invitados que vienen de diferentes ciudades o países, asegúrate de facilitarles la información de hospedaje y transporte. Reservar un bloque de habitaciones en un hotel cercano o coordinar traslados puede hacer que tus invitados se sientan bienvenidos y cómodos. Agregar un mapa o código QR en la invitación es una excelente manera de ayudarles a ubicarse sin complicaciones y de evitar retrasos.
Elegir un lugar sin considerar la cantidad de invitados
Es esencial que el lugar de la boda sea adecuado para la cantidad de personas que asistirán. Un espacio demasiado grande puede hacer que el ambiente se sienta frío y desangelado, mientras que uno muy pequeño resultará incómodo. Consulta con tu venue para confirmar que su capacidad se adapta al tamaño de tu boda, teniendo en cuenta áreas para bailar, para el banquete y para una zona de descanso.
No prever opciones de menú para todos los gustos
Hoy en día, las preferencias y restricciones alimenticias de los invitados son cada vez más comunes, desde personas vegetarianas o veganas hasta aquellos con alergias o intolerancias. Incluir un menú variado, con opciones para diferentes gustos, demostrará tu consideración y permitirá que todos disfruten de la celebración. Una buena opción es ofrecer tres alternativas: una con carne, otra vegetariana y otra que sea libre de alérgenos como el gluten o los lácteos.
Descuidar la selección musical
La música es clave para mantener el ambiente y la energía en una boda, pero también es un área donde muchos cometen errores. Desde seleccionar solo canciones de moda hasta olvidarse de los gustos de los invitados, la clave es encontrar un equilibrio. Incluir canciones clásicas que todo el mundo pueda disfrutar, junto con algunos éxitos actuales, permitirá que la pista de baile esté siempre llena. Crear una lista de “no se toquen” con canciones que no deseas escuchar también puede ser útil, pero piensa siempre en no dejar fuera algo que esté de moda y que a todos les guste.
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No especificar el código de vestimenta de forma clara
Es común que algunos invitados no sepan qué vestir si no se especifica claramente el código de vestimenta. Evita términos confusos y sé claro: por ejemplo, en vez de “Etiqueta Tropical Elegante”, considera usar “Guayabera” o “Vestimenta Cóctel”. Esto evitará que los invitados lleguen vestidos inapropiadamente o que se sientan incómodos durante el evento.
No considerar la orden del día de cada momento de la boda
Los tiempos muertos o las pausas demasiado largas pueden hacer que los invitados pierdan el interés o se sientan aburridos. Asegúrate de planificar una secuencia fluida de eventos: desde la ceremonia y el cóctel hasta el banquete y la fiesta. Una boda sin pausas interminables mantendrá a los invitados animados y enganchados con el evento de principio a fin.
Saturar la boda con demasiadas actividades
Es normal querer entretener a los invitados, pero demasiadas actividades pueden hacer que el evento se sienta abrumador o poco auténtico. En lugar de sobrecargar el programa con juegos, cabinas de fotos, fuentes de chocolate y otros entretenimientos, elige una o dos actividades que realmente representen a la pareja. Esto mantendrá a los invitados enfocados en el verdadero motivo de la celebración: el amor entre los novios.
No tener un kit de emergencia para la pareja
Desde pequeños accidentes con el vestido hasta lágrimas de emoción, es útil contar con un kit de emergencia que incluya pañuelos, parches, maquillaje para retoques y algunos snacks. También es importante recordarle a la pareja que coman algo antes de la ceremonia para evitar mareos o cansancio durante el evento. Estos pequeños cuidados aseguran que los protagonistas de la boda se sientan bien y puedan disfrutar cada momento.
Cambiar drásticamente de look justo antes de la boda
La tentación de cambiar de imagen antes del gran día es común, pero no siempre resulta bien. Desde cortes de cabello hasta cambios de color, lo mejor es evitar cambios radicales de última hora. Opta por hacer pruebas de peinado y maquillaje con semanas de anticipación y evita experimentar con un nuevo estilo en el último momento para garantizar un look impecable en tu boda y con el que te sientas cómodo.
Usar zapatos nuevos sin haberlos probado
Tus zapatos de boda probablemente serán hermosos, pero si son nuevos, es muy posible que te incomoden tras unas horas de uso. Úsalos en casa durante algunos días para “amoldarlos” a tus pies. Además, llevar un par de zapatos extra cómodos para la fiesta será una excelente decisión cuando tus pies necesiten un descanso.
No anticipar los tiempos de elección y ajuste del vestido
El vestido de novia es uno de los elementos más especiales de la boda, y elegirlo lleva tiempo. No dejes esta decisión para el último momento; es recomendable comenzar la búsqueda al menos seis meses antes de la boda. Esto te permitirá elegir, realizar pruebas y ajustar el vestido sin prisas, asegurando que sea perfecto.
Organizar una boda perfecta implica muchos detalles, y aunque es normal cometer algunos errores, estos tips te ayudarán a evitarlos. En The Brible, nos encanta acompañarte en cada paso de tu gran día. Desde la elección del vestido hasta la última canción de la fiesta, estamos aquí para inspirarte y asegurarnos de que tengas la boda de tus sueños. ¡Disfruta cada momento de esta experiencia única y llena de amor!